Editorial: La universidad no debe ser solo trabajo

La mayoría de nosotros no estamos en la escuela lo para divertirnos. Tenemos planes. Tenemos metas. Por lo menos, tenemos vagas esperanzas de que si terminamos la universidad podemos hacer algo que genere dinero. Es una mentalidad universitaria probada y verdadera. Pero a veces, se vuelve demasiado fácil quedar atrapado en la idea de que lo estamos aquí para pasar por las clases y recibir una hoja de papel varios miles de dólares después. Ahí es cuando nos estresamos demasiado, cuando no vemos la meta, sólo vemos los obstáculos. Es fácil sentirse agotado y cansado si no somos intencionales en disfrutar lo que hacemos.

Una solución es tomar un paso atrás y preguntarse por qué haces lo que estás haciendo. Si puedes concentrarte en las razones por las que elegiste obtener tu título, puedes hacer que tu tiempo sea más agradable. Y más importante, si puedes redescubrir las facetas de tu trabajo que encuentras divertidas, los tipos de cosas que a veces se pierden en el bullicio del día a día, se vuelve más fácil lidiar con las cosas que te pesan. Enfocarte en los aspectos positivos de tu experiencia universitaria, la emoción de las cosas qué haces bien y el desafío de las cosas que quieres hacer, puede proporcionar la energía positiva que necesitas para mantener la cabeza en alto. Todo lo que tienes que hacer es recordar las cosas que hacen que tu trabajo sea divertido.